Este hobby se compone de muchas cosas; para algunos de nosotros, vender muñecos es algo relativamente frecuente. En mi caso, muchas veces, cuando me lo puedo permitir, compro muñecas porque me apetece mucho verlas en persona, pintar algunas esculturas y ver si tienen hueco en mi familia. Otras veces, veo cosas a buen precio, oportunidades interesantes sobre las que trabajar, o simplemente, impulsos imposibles de describir... aunque normalmente no compro con intención de vender, no me rasgo las vestiduras cuando eso ocurre, ya que también disfruto del proceso de customización. Si los muñecos al final no son lo que tenía pensado, y no veo arreglo posible, pues sé que es el momento de desprenderme de ellos.
Llego una temporada de ventas algo frenética, intentando recuperar fondos para... bueno, para seguir comprando. Mi familia es un puzzle descomunal, y me cuesta que todas las piezas encajen como deben; si a eso sumamos los caprichos repentinos, o las iluminaciones de las 4 de la mañana ''OMG; esto va a funcionar shegurooo :___D'', empezaréis a comprender por qué hay quecos que entran y salen. Aunque tengo ahí una guardia de irreductibles que están para quedarse, y personajes fijos en los que sigo trabajando, me gusta enfocar el tema desde un punto de vista más flexible. Aunque, si os digo la verdad, esoty un poco cansada ya de comprar y de vender, y de volver a comprar... ultimamente, lo que más me apetece comprar son ropa y conjuntos, de esos carísimos que llevan algunos limitados que salen al mercado. Me encantaría tener un número fijo de personitas en casa y poder dedicarme a comprarles más y más ropa, hacerles encargos... ya me he cansado de la customización intensiva y de la compraventa, quema mucho y yo almenos, no puedo seguir a este ritmo mucho más.
Pero después pasan cosas como estas navidades satánicas, donde la competencia ha sido brutal, y todas las casas nos han puesto contra la espada y al pared del ''ahora o nuncaaah!'', en las que no me queda más remedio que espabilar si quiero conseguir las cosas que em interesan. Y ahí es donde entran algunas de mis ventas recientes:
Ella, la Ónyx con cuerpo de Galena, que está a punto de partir ya a su nueva casa rodeada de amigas:

Ella, la que compré sobre todo porque encesitaba verla en persona.... la persona que accedió a comprármela lleva dos días sin comunicarse conmigo:

Y luego... él, la carita especial. Que es de quien quería hablar:

¿Y quén es él? Pues... no es nadie. En su momento, lo compré porque me encantó su cuerpecillo de 57cm, de articulaciones dobles, y que lo hacían en tan skin. Lidia y yo pensamos que el cuerpo podría encajarle a su Aris, así que, aunque el fabricante, 5Sdoll, había descatalogado esta línea de muñecos hacía tiempo, lo pedimos a ver si nos gustaba.
Cuando llegó, el cuerpecito resultó ser demasiado pequeño para la cabeza de Luna de Iple, pero como el desembolso no había sido grande, no me importó demasiado. Me guardé el cuerpo una temporada, y usé la espantosa cabeza para hacer un ejercicio de custom; me apetecía ver qué salía tallando con la dremmel aquellas facciones asimétricas y afiladas... tuve que rehacerlo entero: le tallé la nariz dejándosela a la mitad de lo que al tenía, e insistí sonre todo en darle un look mono con pegotillo al final, una mezcla entre la de Goldie de Peakswoods y la de Zaoll; La boca casi la borré, y la volví a esculpir a golpe de dremmel y lija para aviones; le cerré los ojos de casi 20mm por completo, rehice las cuencas, todo con masilla de uretano coloreada, y los volví a abrir con una forma totalmente distinta, para dejarlos en 14mm; por último, como me sobró masilla, le hice orejillas picudas de elfito así como caídas, que siempre me han parecido monas... lo lijé todo, lo imprimé y lo pinté un par de veces. El cuerpecito brillaba con un pintalabios de Maybelline, así que lo lijé entero y le dí msc para evitar brillos, luego un poco de blush...
... y le hice fotos para subirlo a vender. Y de paso, me enamoré de él:


Bastante estúpidamente, porque lo he subido a vender... y alguien está dispuesto a pagarme una cantidad más que considerable (no daré números concretos, pero es casi 5 veces lo que me costó). Jamás pensé que alguien podría pagarme eso por este bichito, y sobre todo, jamás pensé que ese ser amorfillo y carente de gracia que llegó a mi casa se iba a convertir en esto. Ahora me debato entre el venderle por el dinero que me ofrecen, y seguir comprando, o el hacerle un hueco en mi casa, porque sé bien que no voy a tener nunca uno así. No sólo están descatalogados desde hace más de un años, sino que, aunque lo consiguiese, está tan modificado que no creo que me volviese a salir igual. La próxima vez, tengo que pintarlo menos mono....

Argh, qué hago?? Me ofrecen mucha pasta, pero es que me gusta tanto... pero no tiene personaje en mi familia, tendría que ubicarlo así un poco a la fuerza, o cambiar la cáscara de alguno de los que están; y no es tan fácil, por eso de que es tanning. Apuf, no sé que hacer, tengo un dilema horrible... que jodido es vender.